Después del incidente con Laura en el camping, un hombre y una mujer inquietantes persiguen a Kilian para saber que pasó en realidad. En el barco de vuelta del viaje de fin de curso a Italia, Kilian coincide con Laura, que tiene experiencias extrasensoriales y ve muertos. Cuando se encuentran, el chico se da cuenta de que él también está muerto y que puede ver los espíritus de los pasajeros que quedaron atrapados en el barco. Si no encuentra a su asesino, tendrá que quedarse en el barco por siempre jamás y no podrá acompañar a Laura, aunque sea como fantasma.
La vida o la muerte se juegan en un viaje de fin de curso.