En esta novela sobre el hundimiento del sueño democrático de la Segunda República, las vidas de Josep Maria Planes, Miquel Badia y Justo Bueno se cruzan en la capital de Cataluña. Son tres jóvenes que encarnan sueños y esperanzas diversas y que serán inevitablemente arrastrados por el viento de la historia. El lector viajará con estas tres figuras al entramado de la política catalana, que se despliega desde la agonía de la monarquía alfonsina hasta los primeros compases sangrientos del franquismo triunfante, desde la lucha por la democracia hasta la pesadilla de una dictadura vengativa.
Con una combinación de tragedia y traición, esta novela nos recuerda cómo la política acabó acercando a dos figuras que a menudo habían estado enfrentadas, Planes y Badia, y cómo ambos fueron víctimas de la ceguera anarquista desatada en 1936. Pero también nos recuerda que aquellos que se prestan al juego de los asesinatos amorales pueden morir a manos de quienes ellos mismos encumbraron.